VIAJAN DOCENTES DEL IEMS CDMX A LA ORGANIZACIÓN EUROPEA DE INVESTIGACIÓN NUCLEAR EN SUIZA
• Esta visita tiene por objetivo que los profesores del bachillerato público de la Ciudad de México conozcan los últimos avances en física de partículas.
Un grupo de 18 profesores y profesoras del Instituto de Educación Media Superior (IEMS) de la Ciudad de México, de la Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación (SECTEI) de la Ciudad de México, viajó a la frontera franco-suiza para visitar las instalaciones de la Organización Europea de Investigación Nuclear, más conocida como CERN (siglas en francés del acrónimo original) donde se encuentra el Gran Colisionador de Hadrones, el más grande acelerador de partículas con el que los científicos buscan profundizar en el conocimiento de la materia y el origen del universo.
A través de un programa de desarrollo profesional del CERN, el más grande en el mundo, las y los docentes mexicanos del IEMS podrán conocer de primera mano los últimos avances en física de partículas y áreas relacionadas, por ejemplo, física, computación e ingeniería; al tiempo que estarán por una semana inmersos en un activo ambiente de investigación científica internacional, que les permitirá convivir con pares de todo el mundo a través de conferencias, talleres y visitas.
Previo a su partida, las y los profesores se reunieron con Ofelia Angulo Guerrero, titular de la SECTEI, quien les expresó su ánimo por esta experiencia: “no alcanzo a describir el significado de la oportunidad única que tienen de visitar el Centro Europeo de Investigación Nuclear, es una ocasión que tienen pocas personas”, agregó que la idea de reunirse era para que se llevaran la mayor información posible y así aprovecharan al máximo su estancia en el CERN.
Por su parte, Gerardo Herrera Corral, investigador del Cinvestav, institución integrante de la Red ECOS de la SECTEI, manifestó que en el CERN, los profesores “se pondrán en contacto con el laboratorio más grande del mundo, ahí van a encontrarse con una comunidad de científicos de todo el planeta. Dicho laboratorio es sin fines de lucro porque en él no se patenta, el conocimiento se pone a disposición del público; es un trabajo científico impresionante y humanista”.
El Gran Colisionador de Hadrones (LHC, las siglas en inglés) es un experimento en el que científicos hacen chocar entre sí partículas subatómicas, protones, principalmente, en puntos determinados donde se ubican cuatro grandes detectores de partículas: ATLAS, CMS, LHCb y ALICE, que registran las trazas de las colisiones para estudiar los elementos que constituyen la materia de la que está hecha el universo y la forma en que interactúa.
Herrera Corral, primer usuario mexicano del CERN y el primer connacional participando en el LHC desde hace tres décadas, colabora en el experimento ALICE, en el que se estudia de manera especial el choque de iones pesados (plomo), de iones ultra relativista que, cuando colisionan, generan condiciones de temperatura y densidad muy altas como las que existieron cuando el universo tenía entre uno y diez microsegundos de edad. La idea es recrear en el laboratorio de manera controlada esas condiciones del universo temprano para estudiar su origen y evolución, explicó.
Compartió que es importante que la sociedad comprenda que un proyecto como LHC tiene resultados tecnológicos de gran interés, que los experimentos e instrumentos que ahí se hacen y construyen son únicos, complejos, que requieren a su vez de una muy alta tecnología para funcionar. “El desarrollo tecnológico que se genera en el CERN es de importancia para los países que participan ahí porque hay innovación y se obtienen avances científicos en varios campos”.
De acuerdo con el investigador del Cinvestav, son cuatro grupos en los que han estado involucrados científicos mexicanos, dos equipos en el LHC en los detectores de partículas ALICE y CMS, y en dos experimentos que no están dentro del Gran Colisionador de Hadrones, pero sí en el CERN, que son NA62 y AMS.
Mitzi Castrejón Galván es profesora de Física en el IEMS del plantel Ignacio Manuel Altamirano, en la alcaldía Magdalena Contreras; y forma parte del grupo que viajó a Suiza, donde espera aprovechar al máximo su estancia en el CERN.
A su regreso tiene pensado compartir con sus alumnos la actualidad en el estudio de la materia y hacerlo con la misma emoción y pasión con la que vivirá la experiencia en la instalación europea de alto nivel científico. “Es importante hacer ver a los estudiantes que sus dudas y preguntas son base para su crecimiento profesional y que esa curiosidad de seguir indagando los llevará a más”.
En tanto, Héctor Miguel Calzada Martínez, profesor de Computación en el IEMS plantel José Revueltas Sánchez, explicó que los motivos que lo interesaron en participar en la convocatoria fue el extenso programa de actividades, sobre todo conocer las computadoras que se usan en el CERN y por la invitación que hace el propio programa de que sus profesores invitados se vayan formando como divulgadores de ciencia. “Quiero ser un maestro del siglo XXI para estudiantes de este siglo y no puedo serlo sin estas experiencias”.
Mitzi y Héctor Miguel coincidieron en la necesidad de sembrar en los estudiantes la semilla y que en ellos crezca el interés por la ciencia, el conocimiento y la tecnología, y se convenzan de que esa es la manera de comprender el mundo que nos rodea y de hallar la solución a los problemas que ahora se enfrentan como el calentamiento global.
Agradecieron ambos a las autoridades del IEMS por esta oportunidad, de ser el tercer grupo que viaja a Suiza y visita el CERN; por su apoyo para participar en esta importante iniciativa y esperan continúe el esfuerzo en los siguientes años.
También, el profesor Calzada Martínez agradeció el entusiasmo y compromiso del Luis Flores, quien trabaja en la Universidad de Hong Kong y es investigador en el CERN, y que con mucho ánimo funge como contacto oficial entre el CERN y las instituciones mexicanas de educación media superior y superior para concretar estas visitas académicas.
De igual manera, espera encontrarse con Cristóbal García, conocido como “El chico partículas”, quien se formó en escuelas públicas y que pese a su juventud tiene una vida llena de experiencias por sus logros e inquietudes. Hoy es uno de los estudiantes mexicanos que están en el CERN, cursa el segundo año del doctorado y actualmente trabaja en el diseño óptico de lo que será el nuevo súper acelerador de 100 km de circunferencia y que en su momento reemplazará al actual de 27 km. Este proyecto se denomina FCC-ee (siglas de Future Circular Collider).
En ese marco, el astrónomo de la UNAM y divulgador, José Franco, comentó sobre la importancia del CERN, del LHC y de la ciencia; de la inversión que se hace en ciencia y tecnología, así como de los beneficios que se tienen de ellas, destacando los avances como el de las tecnologías que ayudan a mejorar la vida diaria, como el www (Word Wild Web), lo que se conoce como internet, que surgió en el CERN, o el descubrimiento en 2012 de una nueva partícula llamada bosón de Higgs, que completó el Modelo Estándar de partículas elementales que componen todo lo que conocemos y las fuerzas con las que interactúan.
La directora general del IEMS, Silvia Jurado, consideró que la visita de un grupo del personal docente a Suiza debe ser una experiencia que sirva de inspiración y se pueda inculcar a los alumnos ese entusiasmo y deseos de obtener su certificado de preparatoria para luego seguir avanzado en su crecimiento. “Todo lo que hagamos en el IEMS y con los alumnos es una inversión que se tiene que cosechar”.